Por: Óscar Fajardo Gil
El hijo predilecto de aldea Barreneché, Totonicapán, Alfredo Ajpacajá - fruto del hogar de Víctor y Margarita, alcanzó la cima deportiva al convertirse en CAMPEÓN de la 58ª Vuelta a Guatemala. "Esto ya no es solo mío, ni sólo de mi equipo, es de todos ustedes, es de toda Guatemala", dijo con lágrimas en los ojos el integrante del Decorabaños de Quetzaltenango, luego de ser premiado con el suéter emblemático y una preciosa copa dorada, en el estadio del parque Erick Barrondo.
Ajpacajá cerró con broche de oro una extraordinaria faena a lo largo de toda la Vuelta, realizada junto a su equipo desde el mismo banderazo de salida de la primera etapa, hace diez días frente al Palacio Nacional de la Cultura. Con dientes y puños apretados, la meta fue trazada desde el año pasado, cuando perdió el liderato de la 57ª Vuelta y se convirtió en colaborador del título obtenido por su coequipero Manuel Oseas Rodas Ochoa. Con humildad y abnegación, sacrificando todo lo que podía, trabajó duro, venció la adversidad y superó valladares, perseveró para cosechar ahora los frutos.
Desde la misma tercera etapa se dio cuenta que este era su momento y su oportunidad, cuando llegó en el grupo de avanzada a la meta en San José Pinula, con el suficiente margen para agenciarse del suéter líder Malta Gallo, recibiendo de la afición deportiva pinulteca los primeros aplausos como portador del ansiado maillot oro.
Así llegó a Amatitlán, para tomar el banderazo de salida de la 4ª etapa, rumbo a San José el Ídolo, Suchitepéquez, en donde a pesar de la victoria del holandés Stephan Baker, con el respaldo de sus compañeros de equipo, retuvo el liderato.
La Contra Reloj Individual, en la 5ª etapa desde Champerico hasta San Sebastián, Retalhuleu, fue ganada por su compañero Manuel Rodas, pero Alfredo Ajpacajá hizo una gran faena y dio una demostración admirable de sus buenas condiciones y fortaleza física.
La jornada dominical se reservó para la 6ª etapa, con circuito de siete vueltas entre San Cristóbal Totonicapán y Salcajá para finalizar con meta en la ciudad de Totonicapán. Como era de esperarse, en su tierra fue recibido por una multitud llena de entusiasmo. A pesar del triunfo del peruano André González, Ajpacajá cumplió con su gente, les prometió llegar como líder y mantenerse como tal. Así fue.
La jornada dominical se reservó para la 6ª etapa, con circuito de siete vueltas entre San Cristóbal Totonicapán y Salcajá para finalizar con meta en la ciudad de Totonicapán. Como era de esperarse, en su tierra fue recibido por una multitud llena de entusiasmo. A pesar del triunfo del peruano André González, Ajpacajá cumplió con su gente, les prometió llegar como líder y mantenerse como tal. Así fue.
Una prueba de fuego fue el exigente circuito entre San Pedro Sacatepéquez y Esquipulas Palo Gordo, en el departamento de San Marcos. Su técnico, Alejo Mazariegos, lo sabía y por eso planificó un trabajo de conjunto para el Decorabaños, para marcar paso y proteger el lidetaro. Así las cosas y respetando el libreto, Ajpacajá llegó a la meta con la potencia necesaria para adjudicarse el triunfo de la 7ª etapa, en medio de la ovación del público que lo recibió con una lluvia de confeti.
La consagración llegó en la 8ª etapa, una dura cronoescalada desde el mirador de Chichicastenango hasta la cumbre de María Tecún, Totonicapán, 16 kilómetros de los cuales los últimos nueve se efectuaron en pura terracería. Ajpacajá fue el último en salir, en medio de la algarabía y apoyo de miles de aficionados quichelenses. Poco a poco fue ganando segundos, A lo largo del recorrido recibió diversas manifestaciones de apoyo por parte de numeroso público. Incluso al pasar por Los Encuentros era sorprendente la gran cantidad de personas convocadas. La difícil rampa de ascenso fue un lienzo en donde Ajpacajá escribió un precioso poema de ciclismo, pedalazo a pedalazo. En la meta estalló la locura cuando apareció y pasó con el mejor registro de tiempo, ganando así su segunda etapa consecutiva, miles de personas celebraron su triunfo, corearon su nombre y anunciaron a grandes voces su virtual título de campeón.
La 9ª y penúltima etapa, entre Pamezabal, Sololá, y El Camán, Patzicía, Chimaltenango, fue hasta cierto punto de trámite. El técnico Mazariegos tuvo dos claros objetivos, defender el liderato general cuidando todo intento de fuga y buscar que Dorian Monterroso sumara puntos en las Metas Volantes. El peruano Gamero se llevó el triunfo, mientras que el líder llegó en el lote principal, un par de segundos atrás.
Como suele decirse en este tipo de competencias ciclísticas: la 10ª etapa fue la del "paseo de los campeones", el gasto fue hecho a lo largo de más de una semana. Ajpacajá fue llevado entre algodones durante las ocho vueltas en el circuito del anillo periférico. La meta sirvió para certificar el triunfo de Alder Torres, del Hino One La Red, y para confirmar lo que todo mundo esperaba: el título CAMPEÓN para Alfredo Ajpacajá, del Decorabaños. El Comité Organizador de la Vuelta dispuso que todos los ciclistas continuarán el recorrido por 1.5 Kms. más hasta el Parque Erick Barrdo, en cuyo estadio se efectuó la premiación.
ALFREDO AJPACAJÁ !CAMPEÓN! justa y merecidamente, es el 15º guatemalteco en ganar la Vuelta. Es el segundo título consecutivo para su equipo Decorabaños, consiguiendo también el de Campeón por Equipos, Dorian Monterroso se apuntó como Campeón de Metas Volantes. Ha sido posible, gracias al patrocinio de la empresa de don René Cifuentes y su esposa Mirna de Cifuentes. Felicitaciones !!!
La consagración llegó en la 8ª etapa, una dura cronoescalada desde el mirador de Chichicastenango hasta la cumbre de María Tecún, Totonicapán, 16 kilómetros de los cuales los últimos nueve se efectuaron en pura terracería. Ajpacajá fue el último en salir, en medio de la algarabía y apoyo de miles de aficionados quichelenses. Poco a poco fue ganando segundos, A lo largo del recorrido recibió diversas manifestaciones de apoyo por parte de numeroso público. Incluso al pasar por Los Encuentros era sorprendente la gran cantidad de personas convocadas. La difícil rampa de ascenso fue un lienzo en donde Ajpacajá escribió un precioso poema de ciclismo, pedalazo a pedalazo. En la meta estalló la locura cuando apareció y pasó con el mejor registro de tiempo, ganando así su segunda etapa consecutiva, miles de personas celebraron su triunfo, corearon su nombre y anunciaron a grandes voces su virtual título de campeón.
La 9ª y penúltima etapa, entre Pamezabal, Sololá, y El Camán, Patzicía, Chimaltenango, fue hasta cierto punto de trámite. El técnico Mazariegos tuvo dos claros objetivos, defender el liderato general cuidando todo intento de fuga y buscar que Dorian Monterroso sumara puntos en las Metas Volantes. El peruano Gamero se llevó el triunfo, mientras que el líder llegó en el lote principal, un par de segundos atrás.
Como suele decirse en este tipo de competencias ciclísticas: la 10ª etapa fue la del "paseo de los campeones", el gasto fue hecho a lo largo de más de una semana. Ajpacajá fue llevado entre algodones durante las ocho vueltas en el circuito del anillo periférico. La meta sirvió para certificar el triunfo de Alder Torres, del Hino One La Red, y para confirmar lo que todo mundo esperaba: el título CAMPEÓN para Alfredo Ajpacajá, del Decorabaños. El Comité Organizador de la Vuelta dispuso que todos los ciclistas continuarán el recorrido por 1.5 Kms. más hasta el Parque Erick Barrdo, en cuyo estadio se efectuó la premiación.
ALFREDO AJPACAJÁ !CAMPEÓN! justa y merecidamente, es el 15º guatemalteco en ganar la Vuelta. Es el segundo título consecutivo para su equipo Decorabaños, consiguiendo también el de Campeón por Equipos, Dorian Monterroso se apuntó como Campeón de Metas Volantes. Ha sido posible, gracias al patrocinio de la empresa de don René Cifuentes y su esposa Mirna de Cifuentes. Felicitaciones !!!